Pablo González-Sabariegos, arquitecto e interiorista: "No compres ni alquiles un piso sin entender bien los metros reales que tiene"

Seguramente te ha pasado alguna vez que buscando pisos ves las fotos y te enamoras por completo de la vivienda. Si a esto le sumas buena ubicación, es bastante probable que no mires nada más que esos elementos y el precio de la vivienda, ya sea de compra o alquiler. ¿Pero te has parado a pensar si realmente merece la pena ese piso? Quizás no te has fijado bien en los metros reales de la vivienda o simplemente no sabes muy bien cómo diferenciarlos. El arquitecto Pablo González-Sabariegos advierte de la importancia de siempre tener claro qué estamos alquilando o comprando antes de dar el paso definitivo. 

"Antes de firmar nada, asegúrate de entender bien la diferencia entre superficie útil, superficie construida y los metros cuadrados reales de la vivienda. No dejes que te confundan con los números y verifica siempre qué parte del piso realmente puedes usar", advierte el arquitecto.

Cuál es la diferencia entre superficie útil y construida de una vivienda

"Muchas veces ves un anuncio que promete un piso enorme y luego, cuando entras, parece la casa del ratoncito Pérez", dice el arquitecto y advierte,"así que revisa bien las superficies antes de comprar o alquilar tu piso y evita sorpresas".

La superficie útil

"Es la superficie que realmente puedes usar dentro de la vivienda: habitaciones, pasillos...". Se trata realmente de la parte de la casa por la que se puede transitar o añadir muebles. En esta superficie no se incluyen ni muros ni pilares, y "tampoco cuentan las terrazas a menos que estén cubiertas, pero se contabilizan al 50%.

La superficie construida

Es la más utilizada. "Entra todo el perímetro exterior, es decir, que incluye muros, tabiques, pilares e incluso conductos de ventilación e instalaciones". Por este motivo, la superficie construida suele ser un 15% o un 25% mayor que la útil. 

La superficie construida con elementos comunes

Es un nivel superior a la clásica superficie construida. Esta superficie suele incluir elementos comunes: "sería la superficie construida más la parte proporcional de los espacios comunes del edificio como los pasillos, escaleras, ascensores, instalaciones". El arquitecto advierte que hay que tener cuidado con esta superficie porque a priori "puede hacer parecer que el piso es enorme", y realmente no.

¿Por qué es importante tener esta diferencia clara?

Conocer la diferencia entre superficie útil y construida de la vivienda evita tener más claro si el valor de la vivienda corresponde con los metros reales de lo que se vende. A veces, un anuncio puede indicar un valor sin especificar si es sobre la superficie construida o la útil. Podrías estar pagando por muros y zonas comunes que no disfrutas directamente. Por eso, es importante conocer bien los metros reales de la casa y valorar. 

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¿Qué otros factores deberíamos tener en cuenta antes de comprar o alquilar una vivienda?

Al margen de la superficie, a la hora de comprar o alquilar una vivienda conviene tener en cuenta estos factores clave: ubicación y entorno, estado de la vivienda y antigüedad, precio y costes asociados, orientación, distribución o incluso ruido ambiental. Como consejo, ya quieras alquilar o comprar una casa, antes de cerrar cualquier operación deberías: 

1. Visitar la vivienda en distintos horarios (mañana, tarde y fin de semana) para calibrar tráfico, ruido y ambiente.

2. Solicita todos los documentos como la escritura, catastral, certificado energético o acta de comunidad.

3. Acompáñate siempre de un profesional, ya puede ser un arquitecto o aparejador, sobre todo si vas a comprar una vivienda muy antigua de segunda mano y a reformar. Esto te ayudará a prever costes ocultos y tener claro cuánto te vas a gastar en darle una nueva vida a la vivienda.