Nos colamos en la terraza de Antonio Banderas y Nicole Kimpel: tiene un limonero, zona 'chill out' y vistas increíbles

Antonio Banderas (64 años) visitó anoche, lunes 7 de abril, el programa de Pablo Motos. El malagueño más internacional se sentó en El Hormiguero para presentar su nuevo musical, Gypsy. El actor hizo un repaso de toda su carrera, empezando por sus películas con Pedro Almodóbar hasta su nueva faceta como productor teatral. Además, el andaluz también habló de algunas anécdotas que ha compartido con dos presidentes de los Estados Unidos, como Barack Obama y Donald Trump.

El primer trabajo en el cine de Antonio Banderas fue Pestañas Postizas, en 1982. En el mismo año, ya empezó con Almodóbar con Laberinto de pasiones, el film que supuso el inicio de una larga trayectoria con el manchego, en las cuales destacan algunas producciones como La ley del deseo (1987) o Mujer al borde de un ataque de nervios (1988). Durante toda su carrera, el actor ha recibido dos premios Goya, uno de Honor en 2014 y el de mejor personaje principal en Dolor y Gloria en 2020. Esta película también le supuso la nominación a los Óscar. 

Uno de los amores más destacados de Antonio Banderas fue Melanie Griffith, a la que conoció en el rodaje del film Too Much en 1995. Un año después, la pareja se casó y tuvo a su única hija en común: Stella del Carmen. Los actores decidieron poner punto y final a su matrimonio en 2014. Poco tiempo después, el malagueño conoció a Nicole Kimpel (45 años) con la que lleva más de una década.

Actualmente, Antonio Banderas y Nicole Kimpel viven en un fabuloso ático de 500 m² en el centro de Málaga. El piso cuenta con mucha luz natural, un salón moderno y pasillos muy bien decorados. Sin embargo, la estancia más especial es la terraza. Está situada en la parte alta de la casa y dispone de unos muebles bien prácticos que conforman una zona chill out de lo más moderna. 

Así es la terraza de Antonio Banderas y Nicole Kimpel en Málaga: moderna y con apliques con mucho encanto

La terraza se encuentra en la última planta del ático. Antonio Banderas ha apostado por poner un toldo clásico de rayas, que combina el blanco con un marrón terroso muy cálido y elegante. Es ideal para protegerse del sol y los curiosos. 

Para darle un toque cálido al ambiente, la pareja ha apostado por un aplique vintage, hecho de acero y con un acabado en bronce de look artesanal. Esta pieza es una gran elección porque contrasta a la perfección con los detalles modernos del resto del espacio. Antonio y Nicole aprovechan la pared entre los ventanales para reforzar la iluminación de la terraza. 

En la imagen, podemos observar que la pareja cuenta con una silla de fibras naturales, que es perfecta para pasar un buen rato descansando al aire libre. Parece ser muy resistente y su material es ideal para que la terraza gane un toque atemporal. Además, un detalle que no queremos dejar escapar es que las ventanas que dan al interior no tienen cortinas. Banderas y Kimpel apuestan por no vestir estas aperturas y aprovechar al máximo la luz solar.

La terraza tiene una enredadera y un limonero

Uno de los protagonistas de la terraza de Antonio Banderas y Nicole Kimpel es el limonero. El árbol se encuentra justo en el centro de la terraza, por lo que se convierte en el punto focal del espacio. Aporta frescura, naturalidad y una nota rde color al ambiente, a la vez que lo refresca. 

Para la decoración de las paredes, Antonio y Nicole han escogido, nada más y nada menos, que una enredadera. Esta planta ocupa casi toda la extensión del muro, por lo que la pareja ha decidido no poner ningún elemento más.

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La terraza tiene una zona chill out

La zona de descanso es el área más funcional de la terraza de Antonio Banderas y Nicole Kimpel. La pareja ha colocado un sofá en blanco crudo muy estiloso, que combina tanto con las paredes como con el resto de detalles decorativos. Además, disponen de un puff circular que va a juego. 

Para conservar la intimidad de la terraza, Banderas y Kimpel han puesto unas maceteras de acero oscuro cerca de la barandilla. Al poner las plantas, gran parte de la estancia queda oculta y la privacidad se mantiene a la vez que se favorece el frescor.