6 ideas fáciles de aplicar y muy resultonas para decorar la pared de detrás del sofá en un salón pequeño

Aunque un salón sea de tamaño pequeño, muchas veces su espacio puede parecer desangelado porque le falta un poco de decoración a su alrededor. Que en él escaseen los metros cuadrados no significa que no pueda ser decorado, al contrario, necesita también que se le dé un poco de vida a través de la decoración, pero, eso sí, hay que saber hacerlo a su justa medida, para no pasarnos ni quedarnos cortas.

Por ejemplo, la pared trasera del sofá siempre se ve desnuda y sin gracia y, con un poco de inspiración, es muy fácil llenarla de vida y hacerla brillar con luz propia. El trabajo de búsqueda de ideas ya lo hemos hecho por ti, así que solo te queda ponerte cómoda y leer tranquilamente estas 6 ideas inspiradoras para decorar la pared de detrás del sofá en pisos pequeños.

1. Una estantería con formas geométricas

La primera idea que queremos compartirte para decorar la pared de detrás del sofá en pisos pequeños es aprovechar sus paredes para añadir un espacio de almacenaje extra al salón. No tienes que hacerlo de manera aburrida, puedes colocar, por ejemplo, una estantería geométrica como la de foto, con formas sugerentes y diferentes compartimentos para exponer libros, plantas o pequeños artículos decorativos. Para que no te agobie el sofá, puedes instalarla en uno de sus laterales.

2. Una balda del mismo color que la pared

Una idea muy resultona para la pared de detrás del sofá, y que no quita espacio, es pintarla de un color llamativo y colgar un estante flotante del mismo color para que ambos elementos se fundan y generen sensación de amplitud. Aprovecha la superficie del estante para crear una composición de láminas enmarcadas en diferentes tamaños.

3. Un papel pintado liso con textura

Otra idea muy resultona para decorar la pared de detrás del sofá y llenarla de personalidad sería colocarle un papel pintado liso del color que más te guste, esté en tendencia o que mejor combine con la paleta de colores que tengas en tu salón. Para añadir ese toque diferencial que haga que todas las miradas es vayan hacia él, puedes elegir un papel que, aunque sea de color liso, su superficie tenga texturas, le añadirá calidez y cierto dinamismo al espacio.

4. Un vinilo adhesivo

Una idea muy sencilla, vistosa y muy fácil de instalar son los vinilos decorativos que se pegan en las paredes. Los hay disponibles en muchísimos colores y diseños para que tengas variedad donde elegir según tus gustos y estilo. Tan solo tendrás que pasar un paño por la parte de la pared trasera del sofá donde vayas a colocarlo, quitarle el adhesivo y pegarlo.

5. Un revestimiento de madera

Otra opción que no ahoga el espacio y que le añade un toque decorativo muy atractivo es cubrir la parte trasera del sofá con un revestimiento de madera. Puedes cubrir la pared completa, del suelo al techo, con láminas de madera o hacerlo hasta la mitad y decorar la parte superior con algún cuadro llamativo. Lo mejor de esta opción es que, además de decorar, protege de paso la pared de la fricción del sofá.

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6. Unas baldas paralelas y alineadas

Por último, para salones pequeños donde cabe un sofá de dos plazas y poco más, puedes colocar a lo largo de la pared trasera del sofá dos baldas paralelas y alineadas. Puedes pintarlas, como en el caso que vimos antes del estante flotante, del mismo color que la pared para lograr mayor equilibrio visual. Decóralas con objetos pequeños, marcos de fotos, libros, un pequeño jarrón con flores, etc.