Las altas temperaturas que acompañan al verano hacen que en nuestras casas necesitemos aparatos, como los aires acondicionados, que nos ayuden a refrescarla para poder estar a gusto en ella. Pero, aunque estos aparatos sean muy eficaces, su uso continuado eleva el gasto en la factura de la luz, lo cual no es bueno ni para nuestro bolsillo ni para el medio ambiente.

Con suerte, existen otras formas ingeniosas para mantener la casa fresca y con buena temperatura sin necesidad de tener encendido el aire acondicionado día y noche. A continuación, te dejamos 5 trucos para refrescar la casa este verano sin gastar luz.

Dormitorio con cortinas de lino y estor de fibras 00531407

Cortinas y persianas son tu mejor baja para proteger tu casa en las horas de más insolación. Mantenlas cerradas. 

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5 trucos para refrescar la casa sin aire acondicionado

Estos trucos para reducir la temperatura en tu casa de manera natural funcionan muy bien y no solo te permitirán disfrutar de un ambiente más fresco, sino que también te ayudarán a ahorrar en la factura de electricidad y a cuidar del planeta. Toma nota y ponlos en práctica:

1. Utiliza cortinas y persianas

Las cortinas y persianas son una de las mejores opciones disponibles para bloquear el calor del sol. Durante las horas más calurosas del día, mantén las cortinas y persianas cerradas para evitar que los rayos solares entren y calienten tu hogar.

Los colores y materiales también influyen, por eso, es mejor optar por cortinas de colores claros y materiales reflectantes que repelan la luz solar en lugar de absorberla. Las persianas térmicas o reflectantes son especialmente efectivas para mantener el calor fuera.

Salón con cortinas de lino 00426470

A primera y última hora del día crea ventilación cruzada en tu casa. 

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2. Practica la ventilación cruzada

Aprovecha las corrientes de aire naturales mediante la ventilación cruzada. Esto lo consigues abriendo las ventanas de habitaciones opuestas para permitir que el aire fresco circule y expulse el aire caliente.

Este método es especialmente efectivo por la mañana y al anochecer, cuando las temperaturas son más frescas. El resto del día lo más recomendable es mantener las ventanas de casa cerradas para que no entre el calor.

3. Decora con plantas de Interior

Las plantas de interior no solo embellecen la estética de tu hogar, sino que también pueden ayudar a mantenerlo fresco. Las plantas transpiran, liberando vapor de agua que enfría el aire a su alrededor.

Para maximizar el efecto refrescante, coloca varias plantas en diferentes áreas de tu casa. Puedes crear un rincón verde en el salón, la estancia más vivida de la casa, aunque también puedes poner plantas en el recibidor, serán la mejor bienvenida o la cocina. Allí puedes elegir plantas aromáticas que, además, te ayudarán a condimentar tus platos. 

Ventiladores de techo

Los ventiladores de techo refrescan y son mucho más económicos que instalar un aire acondicionado.

El Mueble

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4. Instala ventiladores de techo

Los ventiladores de techo no solo son una alternativa más económica al aire acondicionado, sino que también son muy efectivos para refrescar el ambiente. Configura tu ventilador para que gire en sentido contrario a las agujas del reloj durante el verano para crear una brisa fresca que hará que la habitación se sienta más agradable.

Elige un modelo silencioso y con una estética que encaje con el resto de la decoración. Los hay de diseño y que combinan materiales, que se convierten en protagonistas del espacio. 

5. Minimiza el uso de electrodomésticos

Los electrodomésticos como el horno, la secadora y el lavavajillas generan mucho calor, por lo que también contribuyen a 'recalentar' tu casa. Intenta utilizarlos durante las horas más frescas del día, como por la mañana temprano, o, si es posible, evita usarlos por completo.

Opta por comidas que no requieran cocinarse en el horno, como ensaladas o cremas frías, y seca la ropa al aire libre en lugar de usar la secadora. Además, apaga los dispositivos electrónicos cuando no los estés utilizando, ya que también emiten calor, además de consumir energía innecesariamente.