Aunque parezca que el mueble que usas para guardar los zapatos no necesita de un mantenimiento o de una limpieza regular, sí que le hace falta, y bastante. Y es que los zapateros, como cualquier otro mueble de la casa, también acumulan polvo y suciedad en el día a día.
Además, en su interior también se pueden acumular los malos olores que vienen de nuestros zapatos por el sudor de nuestros pies. Al ser un espacio cerrado donde no circula el aire, esos malos olores se podrían pasar al resto de zapatos.
Para que aprendas a limpiar bien tu zapatero, tanto por dentro como por fuera, y para que le quites el mal olor y lo prevengas, te dejamos, a continuación, una sencillísima guía de 8 pasos.
Guía para limpiar el zapatero correctamente
El mueble donde guardamos los zapatos es necesario limpiarlo con frecuencia y correctamente para mantenerlo en buen estado y libre de malos olores. Aquí te dejamos este sencillo paso a paso para que lo limpies fácilmente y sin complicaciones.
¿Qué vas a necesitar?
- Paño de microfibra
- Agua
- Vinagre blanco
- Bicarbonato de sodio
- Cepillo de dientes viejo
- Aspiradora (opcional)
- Aceites esenciales (opcional)
La limpieza paso a paso
- Lo primero es vaciar el zapatero. Debes dejarlo completamente vacío. Para ello, saca todos los zapatos y todo lo que tengas dentro del zapatero. De esta forma, podrás limpiar muchísimo mejor, sin obstáculos y más cómodamente todas sus superficies.
- Elimina el polvo y la suciedad. Una vez tengas el zapatero vacío, debes quitarle el polvo y la suciedad superficial del interior y exterior del zapatero. Puedes usar un paño seco o una aspiradora de mano. Para llegar a los rincones tendrás que humedecer un poco el paño.
- Haz tu propio limpiador. Cuando ya tu zapatero esté libre de partículas de polvo, debes preparar la solución de limpieza. Para ello, mezcla agua y vinagre blanco a partes iguales. Remueve bien.
- Limpia a fondo, por dentro y por fuera. A continuación, humedece un paño de microfibra en la solución de limpieza que acabas de preparar y limpia todas las superficies del zapatero, tanto internas como externas. Si hay manchas difíciles, puedes frotarlas con un cepillo de dientes que ya no uses.
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- Llega el turno de los malos olores. En este quinto paso vas a eliminar los malos olores. Lo que deberás hacer será espolvorear bicarbonato de sodio en el interior del zapatero y dejarlo reposar durante unos minutos. Luego, aspíralo o retíralo con un paño seco. El bicarbonato de sodio ayuda a absorber los olores.
- Seca bien el zapatero. Pásale un paño seco por todas las superficies para eliminar el exceso de humedad. Asegúrate de que el zapatero esté completamente seco antes de volver a colocar los zapatos para evitar la formación de moho.
- Dale tu aroma favorito. Antes de meter los zapatos de nuevo en el interior del mueble, si deseas que desprenda un olor agradable, puedes poner unas gotas de aceites esenciales en una bola de algodón y colocarla en un rincón del zapatero. Los aceites esenciales como la lavanda o el eucalipto funcionan bien para esto.
- Devuelve los zapatos a su sitio Por último, vuelve a colocar todos tus zapatos dentro del zapatero. Puedes aprovechar para organizarlos por tipo, uso o frecuencia que te los pones. Con una buena organización, te será mucho más fácil mantener el zapatero siempre en orden.