Las prendas de lana son muy gustosas y calentitas para el invierno, sobre todo los jerséis, son los mejores compañeros para sobrellevar el frío. Pero, al ser la lana un tejido delicado, hay que tener especial cuidado cuando los lavamos en la lavadora porque, ¿cuántas veces has sacado un jersey de lana después del lavado y te ha encogido unas cuantas tallas menos?
Esto es debido a que las fibras de la lana están compuestas por queratina, lo que provoca que, cuando se exponen a la fricción, al calor y a los cambios bruscos de temperatura durante el lavado, las escamas de la queratina se entrelazan y apelmazan, perdiendo la prenda su tamaño original. Cuando esto nos sucede, nos echamos las manos a la cabeza y dejamos de usar nuestro jersey favorito porque se ha encogido. Pues, ¿sabías que es posible recuperar un jersey de lana apelmazada? Pía Nieto, experta en orden y limpieza del hogar, nos cuenta su paso a paso para lograrlo.
El truco de Pia Nieto para recuperar las prendas de lana que han encogido
Pía Nieto utiliza el poder de sus perfiles sociales (@piaorganiza en Instagram) para promover trucos de orden y limpieza para el hogar. En esta ocasión, nos ha sorprendido con un paso a paso la mar de efectivo para recuperar cualquier prenda de lana que haya encogido durante el ciclo de lavado:
Para que te sea más fácil seguir los pasos que Pía recomienda para recuperar un jersey de lana que ha encogido, te los dejamos aquí por escrito:
- Paso 1. Llena hasta arriba un barreño con agua del grifo fría (nunca caliente).
- Paso 2. A continuación, puedes echar al barreño suavizante para la ropa o acondicionador para el pelo. De manera opcional, también puedes añadir un poco de glicerina líquida, es muy eficaz para suavizar las fibras. Mueve el agua con las manos para que los productos queden bien disueltos.
- Paso 3. Ahora, mete en el barreño el jersey (o la prenda) de lana que te haya encogido y que quieras recuperar. Masajea las zonas más rígidas para que las fibras absorban bien la mezcla de agua y suavizante y se rehidraten.
- Paso 4. Deja el jersey reposando en el agua durante unos 5 - 10 minutos. Pía también aconseja tapar el barreño durante el remojo con una tapa o, incluso, colocando otro barreño encima.
- Paso 5. Una vez pasados esos 5 - 10 minutos, tira el agua y vuelve a llenar el barreño con agua limpia y fría.
- Paso 6. Aclara el jersey muy bien con agua y sácalo, sin retorcer, ni escurrir ni apretarlo con fuerza, ya que estos gestos podrían deformar la prenda.
- Paso 7. Para no dañar la lana, Pía recomienda escurrir el jersey con una toalla. Para ello, coloca una toalla limpia y seca sobre una superficie plana, extiende el jersey de lana encima y enróllalo suavemente junto con la toalla, presionando con cuidado para absorber el exceso de agua.
- Paso 8. Aún enrollado en la toalla, mete el jersey en la lavadora y programa un centrifugado.
- Paso 9. Cuando haya terminado el centrifugado, sácalo, desenrolla la toalla, retira el jersey con cuidado y colócalo en posición horizontal sobre otra toalla seca para mantener su forma.
- Paso 10. Ahora, con mucho cuidado, empieza a estirar suavemente las fibras de la lana con las manos, tanto en horizontal como en vertical. La idea es que el jersey, poco a poco, empiece a recuperar su forma original. Tienes que hacerlo cuidadosamente, ya que las fibras ya están rotas y, por eso, se han apelmazado.
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- Paso 11. Deja el jersey secando al aire sobre una superficie plana y ve ajustando su forma de vez en cuando mientras se seca.
- Paso 12. Una vez que el jersey está seco, ponlo del revés y aplícale vapor a baja temperatura con una plancha o vaporizador para relajar las fibras y dar el toque final. Mientras lo planchas, estira en horizontal y en vertical de vez en cuando.