Todo el mundo decora su casa para sentirse más cómodo en ella. El factor estético es uno de los principales motivos por los que se decora una vivienda. Sin embargo, también la decoración puede ser un factor clave a la hora, por ejemplo, de refrescar una casa en verano. Cuando llega ese calor tan agobiante del verano, toca adecuar cada estancia con tonos más claros, materiales más frescos y ropa de cama apta para la estación y dormir mejor. Te enseñamos algunas ideas para refrescar una de las zonas más conflictivas cuando suben las temperaturas, el dormitorio. Con estas ideas sencillas y fáciles podrás crear una habitación más ligera y refrescante. ¡Toma nota!

 

Dormitorio con mueble bajo la ventana 00549180

La ropa de cama de lino y algodón y los detalles de fibras te ayudan a refrescar tu habitación.

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1. Apuesta por el lino y el algodón

Cuando llega el calor es hora de decirle adiós a la ropa de cama abrigada y dar la bienvenida a materiales tan frescos y como el lino y el algodón. Son los dos textiles por excelencia de la temporada. Para conseguir mayor frescor en la cama, es recomendable acudir a estos dos acabados. Permiten un mayor descanso, son ligeros, transpirables y se pueden conseguir en cualquier firma. 

2. Da la bienvenida a la fibra natural

Hay muchas viviendas que ya cuentan todo el año con piezas de fibra natural. Pero si no es tu caso, no hay problema; siempre puedes renovar estos diseños y acudir en verano a materiales como la rafia, el bambú orgánico, el sisal, el yute, entre otros.

Dormitorio con ventilador 00542233

Un ventilador de techo remueve el aire y añade frescor. Además son muy decorativos. 

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3. Di sí a los ventiladores

Aunque te veas algo tentado a usar el aire acondicionado por la noche, no es nada saludable. Una mejor opción es incluir un ventilador de techo. Remueve el aire y añade ese toque de frescor que necesitas en las noches más intensas de calor. Además, para un dormitorio más fresco, una buena idea es añadir purificadores que mejoran la calidad del aire mientras duermes.

4. Incorpora plantas 

Aunque los ventiladores de techo y los purificadores de aire ayudan a conseguir un ambiente más fresco, lo cierto es que no hay nada como las plantas. Es una forma más económica de conseguir un dormitorio con unos grados menos durante la noche. Además, aportan un toque colorido y estético.

5. Incorpora cortinas ligeras

Es hora de renovar las cortinas y cambiarlas por opciones más ligeras. Renueva estos textiles e incorpora materiales como lino y algodón. Es lo que te decíamos al principio, son dos tipos de acabados que refrescan las estancias y encajan también con la temporada. Además, reflejan la luz natural y convierten al dormitorio en una estancia más apetecible.

Dormitorio decorado en blanco con cómoda de madera 00480352

Viste tus ventanas con cortinas ligeras y apuesta por el blanco si quieres refrescar tu casa. 

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6. El color blanco no falla

Es un tono que no falla en verano y que ayuda a potenciar la luminosidad. Invita al relax, el descanso y permite añadir más colores al dormitorio de forma sencilla, si lo prefieres. Es un color base con el que podrás incorporar multitud de detalles decorativos según la época del año.

7. Apuesta por tonos veraniegos

En el caso de que quieras añadir más color al dormitorio, siempre puedes hacerlo pero con cuidado. Los tonos que mejor quedan en los espacios de verano y que atrae la luz del sol son aquellos como el verde o el azul. Simplemente, intenta añadirlos poco a poco para no saturar el espacio y seguir manteniendo esa frescura que debería tener un dormitorio de verano.