Ahora que nos hemos despedido del verano y las temperaturas están empezando a bajar en los termómetros, es el momento ideal para hacer un cambio en la decoración de tu salón para transformarlo en un espacio más cálido y acogedor. A fin de cuentas, durante los meses de otoño e invierno vamos a pasar mucho tiempo en él y qué mejor que acondicionarlo para convertirlo en un refugio confortable y lleno de estilo. A continuación, te contamos nuestros 5 trucos favoritos para tener un salón más cálido.

1. Viste el suelo con una alfombra

Una de las formas más efectivas de añadir calidez al salón es mediante el uso de textiles cálidos, como por ejemplo, alfombras. Lo mejor de decorar con alfombras es que no solo decoran, sino que también aportan una barrera térmica en los suelos ideal para los meses de invierno, lo que viene especialmente bien en suelos hechos con materiales más fríos como los de piedra, los de mármol o los de cerámica.

Si buscas la máxima calidez, las alfombras de lana son la opción perfecta, ya que son las más cálidas. Para algo más práctico, están las de algodón que son las más fáciles de limpiar, mientras que las de fibra natural aportan textura y tienen un toque atemporal. por último, las alfombras más gustosas son las de pelo largo y mullido.

00315432 salón blanco con chimenea, espejo con marco dorado y mesa baja de madera

Los tonos tierra, terracota y la madera darán a tu salón un aire otoñal. 

RBA

2. Añade colores otoñales

El cambio de temporada es una excelente excusa para renovar la paleta de colores de tu salón. Los colores otoñales como el mostaza, terracota, los tierra o, incluso, un gris sutil, aportan calidez y profundidad al espacio. Una forma fácil de incorporar estas tonalidades otoñales es a través de los cojines del sofá, puedes jugar entre ellos combinándolos en diferentes tonos y texturas. 

Para un toque extra de sofisticación, los elementos dorados, como una lámpara de pie o pequeños accesorios como el marco de un espejo de suelo, pueden hacer que el salón se sienta aún más acogedor. Y si te atreves, ¿qué tal sustituir el blanco de las paredes por sus matices más cálidos? Algunas ideas que pueden subir la temperatura de tu salón: hueso, crema o marfil.

3. Un sí a los muebles de madera curvados

Los muebles curvados, sobre todo los de madera natural (con sus vetas y sus nudos), son tendencia este otoño. El punto más positivo de los muebles de madera con curvas es que, además de ser estéticamente atractivos, aportan suavidad al espacio. Sus formas sinuosas rompen la rigidez de la simetría, creando un ambiente más relajante y acogedor.

Recuerda que la madera es un material cálido que nunca pasa de moda y sus formas curvas pueden transformar cualquier espacio en un lugar de confort.

4. Juega con la iluminación

La luz suave y envolvente es ideal para tener un salón más cálido. Para lograr este efecto, puedes optar por una iluminación en tonos cálidos, con temperaturas de color entre 2700K y 3000K, que generan una sensación íntima y relajada. Por ejemplo, en la zona del sofá, puedes colocar una lámpara de pie con una iluminación más tenue y otra de sobremesa con una pantalla de tela suave que tamice la luz.

Las velas tampoco pueden faltarte, su luz suave tiene un efecto hipnótico y cálido y, a su vez, aportan aromas muy agradables que son capaces de transformar completamente la atmósfera del salón.

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00470652 Cómoda de madera con velas, espejo y lámpara dorada

Añade calidez a tu salón con la iluminación, el cristal y los toques dorados. 

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5. Apuesta por las fibras naturales

Por último, los elementos fabricados en fibras naturales son un excelente recurso para añadir un toque rústico y acogedor a la decoración de tu salón. Los accesorios de mimbre, ratán o bambú, gracias a sus tonos miel y sus texturas naturales, evocan los colores y la calidez del otoño. Puedes incorporar estos materiales en cestas, lámparas, o, incluso, en pequeños detalles como bandejas decorativas.