No hay nada como envolverte en una toalla suave y esponjosa después de salir de la ducha. Sin embargo, para que puedas disfrutar de este placer a diario, es necesario que cuides tus toallas con mucho mimo y amor. Al ser uno de los textiles que más usamos en nuestro día a día, las toallas pueden ponerse ásperas, perder absorción y dejar de oler bien con el uso tras uso y el excesivo de suavizantes durante los lavados.
La buena noticia es que mantener las toallas como el primer día no es difícil si aplicas unos cuidados básicos y haces algunos pequeños cambios en cómo las lavas, secas y guardas. No te preocupes que no tienes que perder tiempo buscando información, nosotras ya hemos hecho el trabajo de investigación por ti y te compartimos, a continuación, los trucos de Andrea Caaveiro (@petitbyandrea) para que las toallas estén siempre perfectas y nuevas como el primer día.
1. Lávalas antes de usarlas por primera vez
Para alargar la suavidad y la capacidad de absorción de tus toallas, Andrea recomienda darle unos cuidados especiales desde antes de utilizarlas por primera vez. Sí, las toallas nuevas deben lavarse antes de su primer uso por dos motivos: higiene y absorción. Al lavarlas, eliminamos residuos de fabricación y conseguimos que absorban mejor el agua.
Para este primer lavado, Andre usa su detergente habitual pero sin suavizante. En lugar de este último, la experta prefiero añadir una mezcla de vinagre blanco de limpieza y bicarbonato de sodio, dos productos naturales y libres de tóxicos que limpian, desinfectan y eliminan los residuos que apelmazan las fibras manteniendo toda la suavidad de tus toallas.
2. Evita el suavizante siempre que puedas
Aunque suene contradictorio, el suavizante no ayuda a que las toallas sean más suaves. Al contrario, recubre las fibras y reduce su capacidad de absorción. Lo que Andrea hace es lo siguiente:
- Usa su detergente habitual.
- Le añade percarbonato de sodio para mantenerlas blancas y eliminar manchas.
- En lugar de suavizante, echa un buen chorro de vinagre blanco de limpieza (también puedes no poner nada).
- En el tambor de la lavadora añado un par de cucharadas de bicarbonato de sodio, que neutraliza los olores, incluida la humedad.
Es importantísimo lavar las toallas de la manera adecuada antes de usarlas por primera vez
RBA
3. El secado también importa
Las toallas se pueden secar al aire, pero con matices. Si el sol es suave, puedes tenderlas al exterior, pero si es fuerte, es mejor hacerlo a la sombra o en interiores bien ventilados ya que el sol fuerte e incidiendo de manera directa las reseca y endurece. Personalmente, Andrea prefiere usar la secadora y añadir unas toallitas caseras impregnadas con unas gotas de aceite esencial con un olor de tu gusto. Así, además de esponjosas, quedan con un aroma increíble.
4. Un lavado especial para mantenerlas perfectas
Andrea también recomienda dar a las toallas un lavado especial cada pocas semanas y le gusta hacerlo así:
- A una temperatura de 60 °C.
- Con detergente, bicarbonato de sodio y vinagre blanco de limpieza.
- Sin suavizante.
Para darles buen olor, puedes echar unas gotitas de aceite esencial en una toallita para la secadora
Zara Home
5. Cómo doblar y almacenar las toallas
Por último, Andrea también nos comparte su mejor truco para asegurar que las toallas están igual de perfectas que el primer día. Y es que la forma en la que las doblas y las guardas marca una grandísima diferencia en su estado y apariencia. A la experta le gusta doblarlas en vertical, primero doblando a lo largo y luego en tres partes hasta formar un paquete compacto. Después, las organiza por juegos (baño, manos, invitados...) y las guarda en cajones, cajas o baldas, siempre en posición vertical. Así ocupan menos espacio y las tienes siempre a la vista y listas para usar.