Marie Kondo

Sigue estos consejos de Marie Kondo y verás qué poco te cuesta hacer el cambio de armario

@mariekondo

¡Vamos a por ello!

¡Marie Kondo al rescate! Haz un cambio de armario fácil siguiendo el método KonMari

Si estás ya un poquito nerviosa porque en unos días toca hacer el cambio de armario, que no cunda el pánico. Siguiendo el método de orden de Marie Kondo, lo tendrás listo en 5 pasos

Cuando una estación del año se va para darle paso a una nueva, esto significa que nos adentramos en una época de cambios. Por ejemplo, ahora que el otoño está cerca, tenemos que enfrentarnos a una de las tareas de la casa más temidas: el cambio de armario.

Y es que con tan solo pensar en que tenemos que hacer el cambio de armario, ya nos ponemos de mal humor. Esto nos pasa porque no sabemos hacerlo correctamente y nos agobiamos ante tanta ropa y accesorios. Para ayudarte, queremos que pongas en práctica estos consejos de Marie Kondo para hacer un cambio de armario exitoso y lo mejor: sin estrés.

1. Vacía el armario

El primer paso del método KonMari para hacer el cambio de armario consiste en sacar todo lo que tengas en el interior. Y cuando Marie Kondo dice todo, se refiere a todo, incluyendo cualquier prenda de vestir o accesorio de verano que tengas en perchas, cajas o cajones. Y eso también incluye los zapatos. El armario te debe quedar completamente vacío.

Además, como en el KonMari se ordena por categorías, también debes sacar la ropa que tengas en otros armarios de la casa. Pon todo encima de la cama y no te asustes al ver la montaña de cosas acumuladas, es necesario que las veas para así hacerte consciente de todo lo que tienes (fundamental para los siguientes pasos del método).

Armario con zona de baldas y barra 00483744

Antes de hacer el cambio de armario debes vaciar por completo baldas, barras y cajones. Pon la ropa sobre la cama. 

RBA

 

2. Clasifica por categorías

Como te hemos comentado en el primer paso, en el método KonMari se ordena por categorías, por eso, ponte delante de la montaña de ropa y ve clasificándola por categoría. Es decir, haz una pila con las faldas, otra con los pantalones, otra con las camisetas y así con todos los tipos de prendas y accesorios que tengas. Así verás mejor qué tienes de cada grupo y evitarás tener cosas duplicadas.

3. ¿Me trae felicidad?

Una vez tengas todo dividido por grupos, ahora debes coger cada cosa, una por una, cerrar los ojos y preguntarte: ¿esta prenda me hace feliz? Si has sentido que la respuesta es sí, entonces debes conservarla. Si ha sido un no, ponla separada y ve haciendo una pila con todo de lo que vayas a desprenderte.

4. Organiza en cajas y etiqueta

Con lo que vayas a conservar para la próxima temporada de primavera- verano, Marie recomienda doblarlas bien y guardarlas en cajas hasta el año que viene. Si tienes algún accesorio que requiera algún cuidado más especial, como un bolso de piel, consulta antes las recomendaciones del fabricante para aprender bien cómo hacerlo.

A medida que vas guardando, cuando hayas terminado de rellenar una caja, ponle una etiqueta en el frontal con el nombre del tipo de prendas que has guardado dentro. Así podrás saber qué hay en el interior de cada caja sin necesidad de abrirla.

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Mujer colocando cajas en el armario 00522484

Guarda la ropa de temporada en cajas etiquetadas por categoría en las zonas menos accesibles. 

RBA

5. Tira, dona, vende, recicla

Cuando ya hayas terminado de hacer el cambio de armario, ha llegado el momento de devolver la atención aquellas pilas de prendas y accesorios que, previamente, decidiste que te ibas a desprender de ellas. Aquí Marie nos propone cuatro acciones diferentes. En primer lugar, si la prenda o el accesorio está ya muy viejo o estropeado y no puede reutilizarse, dale las gracias por el servicio prestado y tíralo (o recíclalo si su material de fabricación es reciclable).

Si la prenda todavía puede tener una segunda vida, puedes donarlo a organizaciones benéficas, ponerlo a la venta en aplicaciones de segunda mano o, incluso, si te gusta la costura y tienes imaginación, quizás puedas sacar otra prenda nueva a partir de una que ya no quieres.