Así es el dormitorio de Irene Rosales y Kiko Rivera: estiloso, pintado en blanco y con una pared del cabecero muy moderna

Irene Rosales y Kiko Rivera tienen uno de los matrimonios más sólidos del panorama nacional. Después de 11 años de amor, la pareja está más feliz que nunca, junto a sus dos hijas en común: Carlota y Ana, y el primogénito del sevillano con Jessica Bueno, Fran. La colaboradora de televisión es el mayor apoyo del DJ, en un momento en el que su relación con algunos de sus familiares pasa por horas bajas. El cantante sigue sin tener ningún tipo de vínculo con su madre, Isabel Pantoja, ni con su hermana, que está a punto de dar a luz. No obstante, en los últimos días Kiko ha hecho alarde de la conexión que sigue manteniendo con su hermano, Cayetano Rivera, y su prima, Anabel Pantoja. 

Rosales y Rivera pasaron por al altar el 7 de octubre de 2016. Desde entonces, la pareja ha sufrido diversas crisis, que siempre han terminado solucionando. Al matrimonio lo pudimos ver concursar en la primera edición de Gran Hermano Dúo, en el que Kiko fue el segundo finalista e, Irene, quinta. En los últimos años, ella se ha dejado ver en algunos platós de televisión, como Fiesta, y el hijo de Isabel Pantoja ha estado centrado en su música. 

Toda la familia vive en una casa en el pequeño pueblo de Sevilla, Castilleja de la Cuesta. Cuentan con una vivienda llena de espacios modernos y mucha luz natural. Una de las estancias más llamativas es el dormitorio. Irene Rosales y Kiko Rivera tienen una habitación muy elegante, en la que todas las paredes están pintadas de blanco. Además, apuestan por decorar la pared de la cama con un cabecero tapizado en beige de lo más atemporal. 

Así es el dormitorio de Irene Rosales y Kiko Rivera: cojines elegantes y mesitas de noche muy prácticas

Uno de los aspectos que más destacamos del dormitorio de Kiko e Irene es cómo han decorado la pared del cabecero. El matrimonio ha optado por mantener toda la pared blanca, sin detalles que la sobrecarguen. Únicamente han puesto un cabecero beige, que destaca por su textura suave y lisa.

Para decorar la cama, la pareja ha escogido unos cojines blancos y beige, ideales para ir a conjunto con el cabecero. Apuestan por cubrir el colchón con un edredón muy cálido, con textura rugosa, que va en sintonía con la tonalidad neutra que predomina en el dormitorio. 

En la parte central del espacio, Irene y Kiko han puesto un espejo alto y estrecho con un marco blanco. Es una excelente elección para dar mayor amplitud visual al dormitorio. 

Una de las grandes protagonistas del dormitorio es la mesa auxiliar situada en un rincón. La estructura es de madera y tiene tres baldas situadas a diferentes niveles. Es perfecta para dar dinamismo al ambiente y otorgarle una nota contemporánea. El matrimonio la decora con jarrones, velas y unas plantas que aportan una nota de naturalidad. 

Además, vemos como Rivera y Rosales van combinando los textiles de la cama. En este caso, apuestan por una funda nórdica de matices rosados, que destaca por su estampado de paisley. Es un print moderno y muy recurrente en el estilo boho. 

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Justo al lado de la cama, nos encontramos con una mesita de noche blanca. Es una pieza estilosa, con dos cajones para guardar y una estructura muy sencilla. El matrimonio sevillano ha decidido añadir una lámpara con base de tono verde salvia, que otorga un toque de color en el ambiente. Este matiz es una de las tendencias de la última temporada.

Para sumar capacidad de almacenaje, Irene Rosales y Kiko Rivera cuentan con un burro para colgar la ropa. Es una pieza portátil muy funcional, que les da un extra de capacidad para guardar y les evita tener las prendas arrugadas. En la parte inferior, dispone de una balda que se puede utilizar como zapatero.