5 ideas originales para decorar un recibidor pequeño y que sea práctico y estiloso

El recibidor es una de las estancias más importantes de la casa, es el encargado de dar la bienvenida a nuestros invitados y el que, además, les genera la primera impresión y les muestra la antesala de lo que se van a encontrar en el resto de los espacios. Por eso, como el recibidor es nuestra carta de presentación, es fundamental mantenerlo siempre ordenado y, como no, bien decorado.

Como los espacios pequeños siempre nos cuestan más decorarlos, te hemos recopilado estas 5 ideas muy originales para recibidores con espacios limitados, unas ideas que te ayudarán a optimizar, al máximo, los centímetros que tengas disponibles mientas lo embelleces combinando practicidad y estética. Sigue leyendo, ¡esto te interesa mucho!

1. Cubre las paredes con papel pintado

Decorar un recibidor pequeño y estrecho no tiene que implicar colocar un mueble en el suelo en un espacio que, por desgracia, no tienes disponible. Una buenísima solución para dar un toque especial, y original, a tu recibidor es cubrir sus paredes con papel pintado. Si quieres añadir un mueble, puedes elegir un modelo pequeñito y que quede suspendido en el aire.

A la hora de escoger un papel pintado para el recibidor debes tener en cuenta la entrada de luz del mismo. Si tu recibidor no tiene una entrada de luz natural directa, elige un papel pintado en tonos claros. Si quieres que sea estampado, lo ideal es que los motivos sean pequeños. Si, por el contrario, tienes luz natural, entonces podrás jugar con alguna tonalidad más intensa. Para que te dé un acento decorativo, lo ideal es que solo revistas una pared con papel pintado. 

2. Añade un banco y un perchero de pared

A veces, menos es más, y, como te dijimos antes, con muy poco es posible decorar la entrada de casa por muy pequeña que sea. Por ejemplo, puedes colocar un banco y un perchero en la pared con acabado en madera para que tu recibidor tenga un toque rústico y acogedor.

En este recibidor, además, cuenta con una mini balda volada, más que suficiente para dejar las llaves al entrar en casa. Y, por pequeño que sea tu recibidor, siempre hay espacio para una planta que dará color y vida a la entrada de tu casa. 

3. Aprovecha el hueco de la escalera

Si justo en la entrada de casa tienes las escaleras que llevan a la planta superior y el espacio que te queda para el recibidor es muy pequeño, una idea muy práctica sería aprovechar el hueco que queda libre debajo de la escalera para crear un rincón con encanto.

Puedes, por ejemplo, colocar un mueble de poca altura tipo consola con una lámpara baja y algún adorno extra, pero nada ostentoso. No tengas miedo a decorar el recibidor con una cómoda, aunque tradicionalmente sea un mueble del dormitorio. Aunque no sean muy altas, las cómodas son muebles robustos con cajones profundos que te ayudarán a guardar en el recibidor. 

4. Coloca una balda volada

Esta idea es económica y socorrida porque lo único que tendrás que hacer es colocar una balda, con las medidas de tu recibidor, en la pared y a la altura que desees. Para una mayor integración con la estancia y una mayor sensación de unidad, puedes pintar esta balda del mismo color de la pared del recibidor.

Esta balda puedes usarla para poner elementos decorativos, como un cuadro, un espejo, un jarrón con flores, una bandeja para las llaves, etc. Si vas a apoyar objetos, puede tener un tope en la parte delantera para que nada se caiga. 

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5. Un mueble adaptado al retranqueo de la pared

Esta idea es muy práctica para recibidores muy muy pequeños, ya que no quita espacio del suelo porque el recibidor se adaptaría al retranqueo de la pared. En el ejemplo de esta foto, se ha aprovechado el espacio del radiador, el cual se ha cubierto con una estructura a medida que, a su vez, hace las veces de consola, con dos cajones y superficie plana para colocar tus cosas y elementos decorativos. También se compone de una balda superior con espacio extra de almacenaje.

Las soluciones empotradas son una buena alternativa cuando los metros escasean en el recibidor. Píntalas del mismo color que las paredes y desaparecerán. Si quieres darles un poco más de protagonismo, puede ser de un tono más subido pero dentro de la misma gama.