¿Papel pintado en el baño? Consejos para revestir las paredes con estilo (¡y no ceder a la humedad!)

Durante años, hemos asociado el uso de papel pintado a espacios del hogar como el dormitorio, la oficina o el salón. Sin embargo, gracias a los avances tecnológicos en materiales, hoy en día es posible usarlo para adornar otros entornos más "complejos"; por ejemplo, las cocinas y los baños. Aunque estas zonas se suelen revestir con piedras como el mármol o componentes como el microcemento y los azulejos, actualmente el papel pintado también tiene cabida. 

Revestir las paredes del baño con papel pintado SÍ es posible. Además de ser una opción creativa y elegante, verás lo fácil que resulta colocar este recurso decorativo en los interiores del cuarto de baño. Olvídate de grandes reformas o instalaciones que quitan largas horas de trabajo. Eso sí, toma en cuenta algunos consejos para que escojas un material adecuado y lo apliques correctamente. 

¿Qué papel pintado se puede colocar en el baño?

Así como existen diversas clases de azulejos o maderas, hay varios tipos de papel pintado que puedes utilizar para revestir las paredes. Evidentemente, no todas son adecuadas para espacios húmedos como el baño.

Una de las opciones más recomendadas es el papel vinílico. Gracias a su resistencia al agua y a su fácil mantenimiento, se suele usar para zonas como el baño o la cocina. El papel vinílico posee una capa de PVC que lo hace impermeable y lavable. De esta manera, puedes eliminar manchas fácilmente con un paño húmedo. 

Otra alternativa es el papel tejido no tejido (TNT). No, no es un juego de palabras; se le llama así porque es un tipo de papel pintado de base textil, pero recubierto con una capa de vinilo. Las fibras no se entrelazan entre ellas y, gracias al vinilo, resulta ser uno de los papeles más resistentes a la humedad. Es perfecto para el baño y no pierde calidez gracias a su apariencia textil. 

¿Dónde colocar el papel pintado para el baño?

Si quieres evitar problemas de humedad y alargar la vida útil del papel pintado, es clave elegir zonas que no estén demasiado expuestas. Un lugar recurrente es la pared del lavabo. En ella, puedes añadir un toque decorativo sin riesgo de que el papel sufra deterioro por el agua.

Por otra parte, si las paredes de tu baño están revestidas con azulejos, no significa que tengas que renunciar al encanto del papel pintado. Una bonita combinación puede ser mantener la mitad de la pared alicatada y el resto empapelado. Se creará una especie de arrimadero con los azulejos. 

Asimismo, los aseos de cortesía son perfectos para aprovechar los diseños y estampados del papel pintado. Estos cuartos suelen estar poco expuestos a la humedad, ya que no se utilizan tanto y normalmente prescinden de ducha o bañera. Ten en cuenta que no se recomienda empapelar las paredes que entren en contacto directo con el agua, por ejemplo, al interior de la ducha.

¿Cómo escoger el papel pintado ideal para mi baño?

Actualmente, la variedad que existe de texturas y estampados de papel pintado es infinita. Pero eso no quita que algunas queden mejor en los cuartos de baño. Las tendencias de este año recuperan los motivos botánicos de antaño, aunque con un toque más sobrio y minimalista. Aquellos papeles que imitan tejidos o texturas artesanales también están muy de moda porque ofrecen un entorno mucho más cálido, sin perder la elegancia que caracteriza a este tipo de revestimientos. 

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Por otra parte, si te gustan las piedras naturales, pero no quieres invertir demasiado dinero y tiempo en revestir las paredes con mármol o cuarzo, no te preocupes. Hoy en día existen papeles vinílicos o TNT que imitan perfectamente la textura de las piedras naturales, e incluso otros materiales como la madera.