El mercado está lleno de suelos fabricados en una gran variedad de materiales diferentes para que podamos elegir el que mejor se adapte a nuestras necesidades estéticas y económicas. Esta variedad de materiales significa que tenemos que informarnos bien del tipo de suelo que tenemos instalado en casa, ya que un suelo de madera, por ejemplo, va a requerir unos cuidados, un mantenimiento y unos productos de limpieza diferentes a los de suelos vinílicos o de baldosa.

Por eso, para mantener la belleza y el estado de nuestros suelos en las mejores condiciones, es necesario saber cuáles son sus necesidades específicas de cuidado, empezando por el tipo de fregona.

Una fregona para cada tipo de suelo

Como cada suelo requiere un tipo de limpieza y un mantenimiento diferentes, es necesario que te informes del material del que está hecho tus suelos para así asegurarte de que empleas los productos y limpiadores correctos. Para que te hagas una idea y sepas por dónde empezar, te dejamos, a continuación, un listado con los suelos más demandados de la actualidad y el tipo de fregona que deberías usar para limpiar sus superficies.

Fregona limpiando el suelo

Fregona limpiando el suelo

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Suelos de madera

Los suelos de madera, como el parquet o la tarima flotante, son muy sensibles al agua y a los productos de limpieza agresivos. Por eso, sobre ellos es recomendable utilizar una fregona de microfibra ya que es suave, no raya la superficie y requiere menos agua para limpiar eficazmente. Asegúrate de que la fregona esté bien escurrida para evitar el exceso de humedad para no dañar la madera.

Suelos de baldosa y cerámica

Para suelos de baldosa y cerámica, Los de baldosa y cerámica son más resistentes y no se dañan con el agua, por eso, se recomienda limpiarlos con una fregona de tiras de algodón, ya que son absorbentes y manejan muy bien la suciedad, el polvo y los residuos pegajosos que a menudo se acumulan en las juntas de las baldosas. En este tipo de suelos también se puede usar una fregona con cabezal de esponja, los dejan muy limpios y brillantes.

Suelos de vinilo

Los suelos de vinilo se están volviendo una opción muy popular gracias a su durabilidad y fácil mantenimiento. Para estos tipos de suelo, las fregonas de microfibra también son excelentes, ya que las microfibras limpian sin dañar la superficie y eliminan la suciedad sin necesidad de productos químicos fuertes. Otra buena opción es una fregona de esponja, que puede manejar bien la humedad sin dañar el suelo.

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RBA

Suelos de mármol y piedra natural

El mármol y otras piedras naturales son materiales porosos y pueden ser sensibles a ciertos productos de limpieza. Para estos suelos, es recomendable usar una fregona de microfibra para asegurarnos de una limpieza sin rayar. Además, es fundamental usar solo agua o productos de limpieza especialmente formulados para mármol y piedra natural para evitar la decoloración o el daño.

Suelos laminados

Los suelos laminados son similares a los de madera y, por eso, también requieren una limpieza cuidadosa para evitar la acumulación de humedad que pueda causar que se hinchen y deformen, de ahí que también se recomienda limpiarlos con una fregona de microfibra, ya que usan poca agua para limpiar (y recuerda escurrirla muy bien).

Suelos de moqueta

Aunque no se limpian de la misma forma que los suelos duros, las moquetas también necesitan mantenimiento y para su limpieza se aconsejan las fregonas a vapor, es decir, un tipo de mopa que usa vapor para desinfectar y limpiar en profundidad estos suelos, eliminando manchas y ácaros del polvo.