En general, a todas nos encanta que se vaya el frío y recibir a la primavera con su sol y su buen tiempo. Ahora, los días son más largos, nuestro estado de ánimo y nuestra energía están por las nubes y pasamos mucho más tiempo al aire libre, y eso te alegra el alma. Sin embargo, seamos sinceras: para llegar a este estado de felicidad primaveral previo a la mejor estación del año, el verano, debemos pasar por el momento más temido cada vez que estrenamos nueva temporada: el cambio de armario.
Eso de tener que guardar la ropa de una estación y sacar la de la nueva nos da agobio máximo porque nos parece un trabajo que quita muchas horas y que nos da dolor de cabeza porque no sabemos ni por dónde empezar. ¿Lo bueno? Pues que este agobio que nos entra cada vez que nos toca hacer cambio de armario es evitable porque lo único que necesitamos es establecer un sistema de orden y organización. Para ayudarnos a conseguirlo, la experta en orden Laura Varo nos ha contado cuál es su sencillo paso a paso para un cambio de armario rápido y cómodo.
Paso 1. Planifica el momento
Laura nos recomienda que, antes de empezar con el cambio de armario propiamente dicho, nos tomemos un momento para planificar qué día nos vamos a dedicar a esta tarea. Es importantísimo que no lo hagas con prisas ni que lo dejes a medias, tienes que dedicarte cien por cien a ello. Laura también recomienda que nos pongamos ropa cómoda, nos preparemos un café o nuestra bebida favorita y que creemos un ambiente agradable con música relajante, una serie de fondo o incluso en silencio si lo prefieres. De esta forma, te será mucho más fácil mantener el foco y disfrutar del proceso.
Lo más importante es que dediques un día entero a hacer el cambio de armario, nada de dejarlo a medias o dividirlo en más días
RBA
Paso 2. Vacía el armario
Antes de comenzar, la experta recomienda que nos aseguremos de que no tenemos ropa sucia, tendida o en la tintorería. Todo lo que vayamos a organizar debe estar en casa y limpio. Después, tienes que dejar el armario completamente vacío: saca toda la ropa poco a poco para no agobiarte y hazlo por partes: empieza por la cómoda, luego la ropa colgada en perchas, y después los estantes. Verlo todo fuera te ayudará a visualizar mejor lo que tienes y tomar decisiones.
Paso 3. Limpia a fondo
Aprovecha que el armario está vacío para limpiarlo bien a fondo por dentro. Primero aspira para eliminar el polvo acumulado y luego pasa una bayeta húmeda con un multiusos. También puedes preparar una mezcla casera que le gusta mucho a Laura hecha a base de agua, un poco de alcohol y un chorrito de detergente de fregar los platos. Si quieres que huela bien, añade unas gotas de aceite esencial o de tu ambientador favorito.
Paso 4. Descarta lo que no usas
Este es el momento de hacer limpieza real. Para hacer este proceso de descarte, la experta en orden nos recomienda que miremos cada prenda y que nos preguntemos:
- ¿Me gusta?
- ¿Está en buen estado?
- ¿Me queda bien?
- ¿La he usado esta temporada?
Si la respuesta es no, esa prenda debe salir del armario. Además, Laura recomienda que usemos cuatro bolsas para clasificar las prendas descartadas y que en ellas escribamos su destino: regalar, donar, vender o reciclar. Puedes vender en apps como Wallapop o Vinted, reciclar en puntos específicos como los de H&M o donar en asociaciones locales.
Para evitar arrugas, Laura recomienda colgar en perchas la mayor ropa posible
RBA
Paso 5. Coloca con orden y sentido
Una vez has colocado lo descartado en sus bolsas correspondientes, Laura nos aconseja que coloquemos en orden todo aquello que hemos decidido conservar. Lo ideal es hacerlo por categorías (pantalones, camisetas, jerséis…) y por colores: te ayudará a encontrar todo más rápido y tu armario se verá más armónico.
Laura también sugiere que colguemos en perchas lo máximo posible para evitar arrugas y mucho mejor si son perchas finas y de terciopelo, ocupan menos y evitan que las prendas se resbalen. También recomienda usar cestos organizadores para colocar en los estantes. Debemos medir bien antes de comprar, incluso podemos reutilizar cajas de cartón. Para prendas dobladas, aplica el doblado vertical o colócalas de forma escalonada para aprovechar mejor el espacio.
¿Y qué hacemos con la ropa de invierno?
La ropa de invierno debe guardarse bien limpia y doblada. Laura sugiere utilizar bolsas al vacío o cajas con tapa para protegerla del polvo y la humedad. También podemos añadir bolsitas de lavanda o saquitos con nuestro aroma favorito para que conserven un olor agradable. El etiquetado de las cajas también es fundamental, sobre todo si las vamos a guardar fuera del armario (en altillos, trasteros…) para que nos sea fácil encontrar lo que necesitemos cuando cambie de nuevo la temporada.