5 sofás que ya no se llevan y 5 que serán tendencia este 2025

El sofá, al igual que el cabecero al dormitorio, es el protagonista absoluto de la estancia más vivida de la casa, el salón. Además de elegir un modelo de sofá que sea cómodo y se ajuste a las medidas del espacio que tengamos disponibles, también es importante seleccionar un modelo que cuente con un diseño actual, ya que, como sea muy anticuado, baja el nivel de la decoración del salón por completo.

Para que tengas tu salón totalmente en línea con las tendencias decorativas de la nueva temporada, te enseñamos, a continuación, 5 sofás que ya no se llevarán y 5 que triunfarán este 2025.

1. No: Sofás muy cuadrados

Los sofás rígidos, angulosos y muy cuadrados han pasado de moda y ya no encajarán en la estética de los hogares del 2025. Este tipo de diseño, con formas estrictas y estructuradas, es frío, poco acogedor y se aleja muchísimo de las tendencias actuales que priorizan la comodidad y la calidez en los espacios interiores. 

2. No: Sofás con reposabrazos altos

Los sofás con reposabrazos altos están perdiendo popularidad debido a su aspecto robusto y, a menudo, poco práctico. Este tipo de diseño puede hacer que un sofá parezca más voluminoso y menos adaptable, además de dificultar la comodidad al sentarse o tumbarse. Además, los reposabrazos altos pueden dar una sensación de encierro visual, limitando la fluidez y ligereza que se busca en las tendencias actuales de decoración.

3. No: Sofás de piel negra o marrón oscuro

Aunque durante años fueron un símbolo de elegancia y sofisticación, los sofás de piel en tonos oscuros, como el negro o el marrón chocolate, van a desaparecer este 2025. Hoy en día, estos modelos se perciben como pesados y poco acogedores, especialmente en espacios reducidos o con poca luz natural, donde pueden dar una sensación de opresión o de ambiente anticuado.

4. No: Sofás reclinables grandes

Aunque los sofás reclinables grandes siempre se han considerado como muy cómodos, están cayendo en desuso en la decoración de interiores debido a su estética poco refinada y su dificultad para integrarse en espacios más contemporáneos. Estos sofás reclinables, con mecanismos visibles y diseños voluminosos, suelen romper la armonía visual de los salones, creando un aspecto pesado y desfasado que no encaja con las líneas limpias y equilibradas de la decoración más actual.

5. No: Sofás con patas de madera

Los sofás con patas de madera es una moda del pasado y, si en 2025 luces un sofá con estas características en tu salón, lo tendrás bastante desfasado en términos decorativos. Y es que este tipo de patas de madera, especialmente cuando son gruesas o de acabados tradicionales, se alejan bastante de la ligereza que exige esta nueva temporada.

6. Sí: Sofás blancos

Aunque los sofás blancos tienen fama de sucios, se siguen imponiendo año tras año, y las tendencias en el mundo del interiorismo apuestan para que el próximo año 2025 siga la hegemonía de los sofás blancos. 

Y es que el blanco, además de ser un color que aporta mayor sensación de luz, y aunque parezca contradictorio, es fácil de encajar en todo tipo de estilos, no pasa de moda y es fácil de combinar y actualizar con los textiles que le rodean. Además, siempre parecerá menos voluminoso que un color oscuro y son fáciles de limpiar si tienen una buena funda. 

7. Sí: Sofás con tapicería de pana

La tendencia de lo vintage también tendrá su hueco en el mundo de los sofás la próxima temporada y lo hará de nuevo, en forma de tapicería de pana. Y decimos que "lo hará de nuevo" porque hace un par de años la pana empezó a asomarse tímidamente en los sofás, aunque no será hasta este otoño-invierno 2024-2025 cuando estará pisando fuerte. Además, viene estupendamente bien para refugiarnos en los días más fríos.

8. Sí: Sofás con curvas

Como vimos antes, los sofás cuadrados y sin gracia son cosa ya del pasado, los nuevos del 2025 vienen con muchas curvas. Serán sofás elegantemente redondeados y con bordes suaves para aportar fluidez, dinamismo y movimiento al espacio. Lo mejor, es que adaptan a cualquier estilo decorativo, desde el más contemporáneo al más retro.

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9. Sí: Sofás con patas altas

En 2024 los sofás dejaron de estar a ras del suelo y se elevaron unos centímetros del mismo. La tendencia causó tal furor, que este 2025 se seguirán llevando los sofás con patas altas. Además de darle un aspecto muy elegante y esbelto, también es un plus para pasar la aspiradora o el robot aspirador por debajo del sofá cómodamente.

10. Sí: Sofás con reposabrazos bajos

No se llevarán tanto los sofás voluminosos, sino más bien piezas de diseño minimalista, con líneas limpias y elegancia discreta, ya que su objetivo es añadir amplitud y apertura al salón para que parezca más aireado. Por eso, cuanto más simple sea el diseño del sofá, mejor, de ahí que la tendencia del 2025 sea que sus reposabrazos sean bajos. Incluso, también está permitido que no los lleven.