¡Por fin mi cocina está RELUCIENTE! Así usé el vinagre para limpiarla de forma rápida, eficaz y súper económica

¿Te toca limpiar la cocina y no sabes por dónde empezar? ¿Ya se te acabó el quitagrasas, la lejía, el fregasuelos, etc.? ¡Millones de productos que podrías reemplazar por uno solo! Seguro que ya sabes de cuál estoy hablando: nuestro amado vinagre. Un método natural, económico y súper efectivo que nos va a ayudar a dejar la cocina reluciente en un santiamén. ¡Empecemos!

Lo primero: elige el vinagre que usarás

Antes de ponerte manos a la obra, debes elegir el tipo de vinagre que usarás para dejar tu cocina impecable. Solo tienes dos opciones: vinagre blanco y vinagre de limpieza. Ambos son efectivos, aunque el vinagre de limpieza es más recomendable para manchas difíciles y resistentes. Asimismo, es un vinagre NO apto para el consumo humano. Por el contrario, el vinagre blanco destilado, sí que puedes usarlo para cocinar o condimentar tus comidas. Ambos son productos 100% naturales que te ayudarán a cumplir exitosamente con la misión que tenemos hoy: dejar la cocina reluciente.

¿Cómo limpiar cocinas con vinagre?

El vinagre es conocido por sus propiedades desinfectantes y desengrasantes. Este producto casero y natural es excelente para limpiar la cocina, tanto las encimeras como los electrodomésticos y el suelo. 

Primer paso: Prepara la mezcla base

Para empezar, necesitas preparar una solución básica de limpieza. En un pulverizador, combina a partes iguales vinagre blanco y agua. Si tu cocina tiene mucha grasa pegada, añade bicarbonato en la mezcla. ¿Cuánto? Depende de la cantidad de líquido a utilizar. A un litro de solución, yo sumo dos cucharadas grandes de bicarbonato.

Segundo paso: Aplicar la mezcla

Pulveriza la mezcla sobre las superficies de la cocina, incluyendo la encimera, los electrodomésticos, los grifos, el fregadero y los muebles de almacenamiento. En el área de la zona de cocción suele acumularse bastante suciedad. Por eso, es mejor sacar todas las partes y hacer una limpieza profunda con vinagre y bicarbonato. Te recomiendo que dejes actuar la mezcla una media hora para que el metal quede bien limpio. Gracias a la efervescencia de ambos productos, quitarás hasta las manchas más resistentes.

Ahora bien, si tu encimera es de piedra natural, ten cuidado porque podría dañarse al usar vinagre de limpieza. En este caso, usa vinagre blanco en más cantidad de agua. Deja que la solución repose durante unos 10-15 minutos para que pueda actuar sobre las manchas.

Tercer paso: Fregar y aclarar

Usa una esponja o un paño suave para frotar enérgicamente las superficies limpiadas. Verás que las manchas y la grasa se desintegran fácilmente. Después, enjuaga con agua y seca con un paño limpio.

¿Cómo limpiar muebles de cocina con vinagre de limpieza?

Limpia los muebles laminados o de madera con vinagre. Si tu encimera tiene un manual de instrucciones, revisa la información antes de aplicar cualquier producto, sea vinagre o cualquier limpiador industrial. 

En primer lugar, mezcla una taza de vinagre de limpieza con dos tazas de agua. Estas proporciones son las indicadas para muebles delicados, ya que no es abrasiva. Humedece una bayeta en la mezcla, escúrrela y friega las superficies. Después, simplemente tienes que secar con un paño seco.

Si quieres que tus muebles de madera luzcan puedes aplicar una pequeña cantidad de aceite con otro paño. ¿De oliva? ¡Sí! Puede ser un aceite mineral o uno vegetal como el de oliva o el de coco.

¿Cómo limpiar el suelo de la cocina con vinagre?

La mayoría de los suelos de cocina pueden ser limpiados con vinagre y agua. Por ejemplo, los azulejos de cerámica, terracota o gres. Para piedras naturales o granito, es mejor que uses productos específicos para esos materiales. 

Antes de empezar a fregar, mezcla una parte de vinagre blanco con una parte de agua en un cubo. Si el suelo está demasiado sucio o tiene manchas difíciles, añade dos cucharadas de bicarbonato por cada litro de solución. Asegúrate de barrer el suelo antes de aplicar la mezcla para eliminar polvo y residuos sueltos.

Sumerge una fregona en el cubo con la solución de vinagre y agua. Escúrrela bien y friega el suelo como lo harías normalmente. Presta atención a las áreas con manchas visibles o acumulación de grasa. Si hay restos de grasa o de cal que no salen, utiliza un cepillo de cerdas suaves y frota directamente. Deja actuar unos minutos antes de fregar nuevamente. 

Para suelos de madera, intenta no empapar demasiado la fregona. Seca bien después de limpiar para que la madera no se vea dañada a largo plazo.

Y si gustas, puedes sumar unas gotas de aceite esencial de tu aroma favorito. Conseguirás que tu cocina quede con un olor fresco muy agradable. Lo mejor de todo es que no has utilizado ningún producto industrial o químico. ¿Ya tienes todos tus utensilios preparados? ¡Vas a dejar tu cocina como nueva!