Aunque nos encante cocinar, muchas veces nos limitamos ante determinadas recetas para evitar que nuestras herramientas se destiñan o se terminen estropeando. Cuando en la tabla de cortar, por ejemplo, colocamos un adobo o algún alimento con pimienta, después resulta muy difícil eliminar las manchas y devolver el utensilio a su estado original. Lo mismo ocurre con los tuppers, sobre todo cuando son transparentes y guardamos en ellos alguna receta con salsa de tomate.
Y es que, aunque el plástico de los tuppers parezca liso, tiene pequeñas porosidades microscópicas que actúan como una esponja, absorbiendo los pigmentos rojos que la acidez del tomate da a este fruto y haciendo muy difícil la tarea de eliminarlos, algo que favorecen los tupper herméticos, en los que, la falda de ventilación ayuda a que esas manchas se fijen más y más a la superficie. ¿Cómo podemos terminar con ellas? La experta Marga Díaz (@decorbymaggie) nos cuenta el truco más sencillo con el que lo podremos conseguir. ¡Toma nota!
Es posible eliminar las manchas de tomate de los tuppers con estos trucos de experta.
El Mueble
El truco de experta para terminar con las manchas de tomate de los tuppers
Marga Díaz (@decorbymaggie) es experta en limpieza del hogar y nos cuenta cuál es su tip estrella para acabar con las manchas de tomate que se quedan incrustadas en sus tuppers. La experta explica que, cuando tenemos una fiambrera con manchas de salsa de tomate, tan solo tendremos que echarle agua y un chorro de jabón de platos, meter dentro un trozo de papel de cocina doblado, ponerle la tapa y agitarlo bien. "Verás que queda como nuevo", asegura.
Este truco es muy efectivo porque, por un lado, el jabón de lavar los platos cuenta con propiedades desengrasantes, que desincrustan la grasa y la suciedad, rompiendo sus partículas y haciendo que se dispersen por el agua. El papel de cocina, por su parte, tiene propiedades ligeramente abrasivas que, además de ayudar a que la grasa se desprenda del tupper, conseguirán absorber las partículas para ayudar a removerlas mejor. Además, al agitar la mezcla, conseguiremos que las propiedades de ambos productos se activen, logrando terminar con rapidez y eficacia con las manchas de tomate o de cualquier otra salsa que haya ensuciado nuestros tuppers.
Otros trucos para eliminar las manchas de los tuppers
A pesar de que el truco de la experta es tan práctico como rápido y sencillo, no es el único con el que podremos combatir las manchas de tomate de nuestros tuppers. Para facilitar el proceso, no obstante, es vital meterlos en remojo antes de aplicar ninguna solución, evitar frotarlos demasiado para que no se rayen y probar cualquier solución en un área pequeña para asegurarnos de que no estropeará el plástico. Además, es recomendable lavar bien los tuppers después de cada uso, para evitar que estas manchas se integren demasiado y terminar también con los olores persistentes.
Con estos trucos conseguirás eliminar las manchas de tomate y de cualquier otra salsa de tus tuppers, ayudando a que luzcan realmente limpios.
RBA
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Con bicarbonato de sodio
Tendremos que hacer una pasta con este ingrediente y agua, frotar un poquito en el tupper y dejarlo actuar durante algunas horas o, incluso, toda la noche. Es muy efectivo porque tiene capacidades ligeramente abrasivas y una gran capacidad para neutralizar ácidos como los que contiene el tomate, por lo que ayuda a limpiar bien el recipiente sin estropearlo.
Con vinagre blanco
Podemos echarlo directamente en el tupper o mezclarlo con agua, dejarlo actuar durante, al menos, media hora, y después lavar bien el recipiente para lograr que la mancha se vaya. El vinagre está formulado con ácido acético, que descompone los pigmentos rojos del tomate, rompiendo las moléculas que provocan su coloración y logrando que la suciedad se vaya con facilidad cuando lavemos el tupper.
Con limón y sal
Exprimiendo el zumo del limón, mezclándolo con sal y frotando por todo el tupper con la cáscara de este cítrico, conseguiremos acabar con las manchas de tomate. El limón tiene propiedades ácidas que eliminan los pigmentos del color del tomate y la sal, por su parte, actúa como un abrasivo suave, que desprende las moléculas de suciedad sin rayar las superficies. Juntos, por tanto, funcionan como un limpiador muy potente.