Descansar en un dormitorio bien decorado es todo un sueño, nadie lo puede negar. Pero si hay algo que realmente marca la diferencia entre una experiencia agradable y una estética sosa, son los textiles. Además de su importancia estilística, los tejidos de las fundas, la textura de los cojines o la transparencia de las cortinas influyen en la comodidad.
Conversamos con la estilista de El Mueble e interiorista de Vestir tu Casa, Sol van Dorssen para saber cuáles son las claves a la hora de decorar con textiles el dormitorio. Estas son sus conclusiones y consejos que nos ayudarán a crear habitaciones más acogedoras y agradables.
Crea capas en la cama
Dormitorio con cama a medida, cortinas de lino blancas de Aiguavista, ropa de cama de Filocolore. Proyecto de Sol Van Dorssen.
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Crear capas para lograr una profundidad visual acogedora y enriquecida es una de las claves a la hora de decorar. Esta práctica cobra especial importancia cuando los textiles son los protagonistas. "Me encanta colocar varias capas en la cama para dar volumen y calidez", nos dice Sol. El dormitorio es un espacio que requiere de complementos, tejidos suaves y texturas variadas.
"A los pies de la cama suelo colocar un plaid acolchado en color o en un tono neutro y debajo una colcha a juego", concluye la experta. ¡Hermosa combinación!
Pon cojines de tamaño XL
Proyecto de la interiorista Marta Prats.
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Así como las fundas y mantas cumplen un papel esencial, los cojines decoran y ofrecen comodidad y soporte al cuello. Pueden ser un elemento importante en la paleta cromática de la cama. Las texturas escogidas también serán relevantes: ¿prefieres un conjunto suave, con algodón y terciopelo? ¿O quizás un conjunto más rústico con lana, lino y tejidos artesanales?
La interiorista Sol Van Dorssen nos comenta que es muy fan de vestir la cama con cojines grandes situados contra el cabecero. "Los cojines de 60 cm x 60 cm son una buena medida para colocar contra el cabecero. Elígelos en algún tejido bonito como lino lavado o franela. ¡Hará muy acogedora la cama! Por delante, puedes acompañar con unos cojines rectangulares en otra textura. Así tendrás la cama a punto", aconseja.
Protagonista: la pared del cabecero
Dormitorio con cabecero, en DM lacado diseño de Sol Van Dorssen. Papel vinílico, de Caselio. Jarrones, de Catalina House. Mesitas, de Crisal. Lámparas de techo, de Onit Sele.
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"La pared del cabecero es la protagonista del dormitorio", nos dice la experta. Esta pared ofrece múltiples opciones creativas, incluso se puede jugar con las apariencias textiles para revestir la pared.
"Me gusta colocar un papel pintado con textura de espiga en color beige, rayas muy finitas o papel tipo rafia. Estas opciones visten mucho la zona de la cama", nos cuenta Sol. El cabecero tampoco debe olvidarse, sobre todo aquellos de textura suave y acogedora: "Suelo colocar un cabecero tapizado que aporta mucha calidez", añade la interiorista.
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Cortinas con encanto
Cabecero, de Kenay Home. Pared decorada con individuales, de Zara Home y El Corte Inglés. Proyecto de Paula Duarte.
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Cuando hablamos de textiles en el dormitorio, no nos referimos solo a las fundas, cojines o colchas. Las cortinas de la habitación son fundamentales para regular la entrada de la luz natural, modificar la temperatura y enmarcar la ventana. Cumplen muchas funciones además de dar un toque sereno, relajado o elegante al ambiente.
"Las cortinas son un textil fundamental en el dormitorio", afirma la interiorista. "Estores y cortinas caídas es la fórmula más acogedora para mí. Luego, ¡hay que escoger tejidos con textura y buena caída que den el toque final!", aconseja.
¿Conocías estas cuatro claves de interiorista para vestir el dormitorio? Como ves, los materiales a escoger son fundamentales para diseñar un espacio acogedor. También son importantes los colores, las texturas y la disposición de cada pieza.
No te olvides de complementar con una bonita alfombra, algún banco o butaca y unas mesitas de noche con capacidad para mantener todo ordenado. Finalmente, iluminar el dormitorio de manera correcta ayudará a que todos los textiles resalten y ostenten sus detalles particulares. Instala apliques a los lados de la cama o dos lámparas que emitan luz cálida. ¡Y voilà! Tendrás un dormitorio súper acogedor del que no te van a dar ganas de salir.