Junto a la cocina, el baño es una de las estancias más desordenadas de la casa. Es un espacio que está transitado con mucha frecuencia, razón por la que el caos se apodera regularmente de todos sus rincones. La gran mayoría de personas cuentan con cuartos de baño muy pequeños, por lo que no se pueden permitir tener todo por el medio y hecho un desastre.
Algunas de las soluciones de orden más frecuentes en esta estancia es la de guardar todo en muebles de almacenaje o dejar lo justo y necesario. Hemos decidido ir mucho más allá y optar por trucos muy sencillos que cambiarán la distribución de tu baño pequeño para siempre. Nos hemos inspirado en los consejos de grandes expertas, como Marie Kondo y Vanesa Travieso, para que la organización vuelva al baño. Desde deshacerse de las cosas que no hacen falta hasta cambiar algunos detalles decorativos, son solo algunas de las alternativas para que este espacio luzca como nuevo.
Los 10 trucos de orden para que el baño esté bien aprovechado
1. Despídete de los muebles voluminosos
Para organizar diferentes productos, como el jabón y el champú, opta por una estantería que se pueda implementar en la pared de la ducha. De esta manera, se saca partido a los metros disponibles de la pared y parte del suelo queda libre para otro fin. De esta manera, si cuentas con un mueble grande, dale una nueva función en otra estancia de la casa.
2. Utiliza cestas
Todas aquellas cosas que solemos tener cerca del lavamanos o en las superficies de los muebles, deben tener un lugar asignado. Para que estén bien distribuidas y, a la vez, a la vista, apuesta por unas cestas. Estas piezas suelen estar hechas de materiales muy naturales que otorgan mucha serenidad al baño.
3. Deja de guardar toallas
Uno de los trucos más inspiradores de Vanesa Travieso es la de deshacernos de esas toallas que no utilizamos. Tendemos a guardar todas las piezas de las que disponemos en el baño, cosa poco práctica si se cuenta con un espacio muy reducido. Para ello, la mejor solución es dejar solo las toallas necesarias en la zona de aseo y almacenar las otras en armarios de otras estancias.
4. Buena organización en los cajones
Marie Kondo tiene muy claro que la distribución dentro de los muebles de almacenaje es muy importante. Aunque visualmente el desorden de sus interiores no se vea, rompe con la correcta armonía del ambiente. Replicando su método KonMari, una buena idea es la de optar por organizadores para el interior de estos elementos. De esta manera, no se deja ningún cabo suelto y se aprovecha al máximo la capacidad de guardar.
5. Colgadores muy eficientes
Los toalleros y los muebles que garantizan tener todo en orden son perfectos en baños amplios. Sin embargo, hay una alternativa mucho más efectiva, como son los colgadores. Su presencia es muy discreta, ocupan cero espacio y pueden sujetar diferentes piezas.
6. Los textiles se deben secar fuera
Los albornoces y las toallas se dejan con frecuencia dentro del baño para que se sequen. Además de ser poco práctico por el exceso de humedad, dan la sensación de que la estancia está desordenada. Cuélgalas en lugares destinados a colgar la ropa, como en el tendedero y deja disponible esos metros del servicio para otras finalidades.
7. Cuanto menos, mejor
Procura que la superficie del mueble principal, como suele ser el del lavamanos, esté bien libre de objetos innecesarios. Deja solamente una jabonera, una toalla pequeña y un elemento decorativo muy discreto para que el baño se vea más amplio. De esta forma, la funcionalidad primará en la estancia.
8. El baño no es una despensa
Otro de los trucos influenciados por la metodología de Vanesa Travieso es la de dejar de acumular cosas en la recámara del baño. Aquellos productos de recambio que van relacionados con el aseo, como son los jabones, los solemos dejar en este cuarto para tenerlo a mano cuando se agoten. Esto es un gran error porque quita espacio y desaprovecha el espacio de almacenaje. La solución más certera es guardarlos en otros lugares e ir controlando con frecuencia la cantidad de los botes.
9. Orden inmediato
Para que la desorganización no se vaya acumulando, no destines un único día para ordenar el baño. Todo aquello que puedas dejar en su sitio y bien doblado en menos de un par de minutos, hazlo al instante. Es un truco muy utilizado por las expertas del sector, ya que ahorra tiempo y dedicación.
10. Cada clase de objeto en su lugar
Una de las claves de la filosofía de orden de Marie Kondo es dividir los productos en diferentes clases. Aquellos que sean de la misma familia deben estar juntos y bien clasificados, con la finalidad de que cuando los necesitamos los tengamos bien localizados. Destina una zona del baño específicamente para guardarlos y no tenerlos desperdigados por todo el espacio.