Trini Pérez, experta en orden: "En el armario de la vajilla intercalo copas boca arriba y boca abajo y me caben el doble"

En todas las cocinas siempre hay un armario reservado para guardar la vajilla, los vasos y las tazas. Y en todas las cocinas es importantísimo contar con un buen sistema de organización que, además de que nos permita encontrar un plato o una taza con facilidad, también nos ayude a aprovechar al máximo el espacio, evitar roturas y mantener todo limpio y accesible. Además, un armario de la vajilla bien organizado también transmite sensación de orden, facilita la rutina diaria y hasta invita a disfrutar más de poner la mesa.

Afortunadamente, no hace falta hacer una gran inversión ni tener una cocina enorme para conseguirlo. Es tan fácil como seguir los consejos que Trini Pérez, experta en orden y limpieza del hogar, nos ha contado a continuación. Son unos trucos fáciles de implementar que nos ayudan a convertir el armario de la vajilla en un espacio más eficiente y con más armonía visual.

1. Intercala las copas

Este primer truco de organización para el armario de la vajilla que nos ha compartido Trini nos encanta y nos ha parecido todo un descubrimiento. La propuesta de la experta es que, en lugar de colocar todas las copas boca arriba y con la base apoyada en la superficie del estante, las vayamos intercalando una boca arriba y otra boca abajo.

Aunque parezca un gesto insignificante, colocarlas de esta forma ayuda a ahorrar espacio, ya que permite que las copas encajen mejor entre sí, evitando que ocupen tanto ancho en el estante. Además, también puedes distribuirlas por tipo (vino, cava, agua) para ganar orden visual. Eso sí: asegúrate siempre de que estén bien apoyadas para evitar que se rocen o se caigan.

2. Coloca las tazas de café tumbadas

Otro trucazo de Trini que nos ha parecido lo más tiene que ver con los juegos de café y de té que están formados por tazas y platos pequeños. Por lo general, siempre se apilan las tazas, por un lado, formando una torre y los platos, por otro lado. Para ahorrar espacio y añadirle un poco de más seguridad a estas piezas, la experta sugiere colocar las tazas tumbadas y encajadas unas dentro de otras por el mango.

Esta forma de organización viene muy bien para juegos de café o de té que uses con frecuencia, ya que te permite acceder fácilmente a cualquiera sin necesidad de levantar varias.

3. Usa estantes adicionales

Cuando necesitas sacar un plato llano y para ello tienes que quitar todos los de encima, es señal de que necesitas estantes adicionales. Son estructuras que se colocan dentro del armario y permiten crear una segunda altura sin tener que taladrar ni modificar nada. Hay versiones más anchas, ideales para platos y vasos, y otras más estrechas que vienen genial para colocar cuencos, tazas o pequeños accesorios.

Más tips para organizar el armario de la vajilla

Además de estos tres consejos que nos ha contado Trini, consideramos que estos también te van a ser muy útiles y que ya el resultado sí que será de experta en orden de altísimo nivel:

1. Limpia antes de reorganizar

Antes de nada, lo primerísimo que debes hacer es dedicar unos minutos a vaciar completamente el armario de la vajilla y limpiarlo por dentro. Es la ocasión perfecta para hacer revisión, deshacerte de piezas rotas o desparejadas, y dejar espacio solo para lo que realmente usas.

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2. Agrupa por uso y frecuencia

Una regla de oro para organizar cualquier espacio es: lo que más usas, más a mano debe estar. En el armario de la vajilla, esto se traduce en colocar los platos del día a día al frente, las tazas de uso frecuente a la altura de la mano y los objetos más delicados o de uso ocasional en las zonas altas o al fondo. Agrupar por categorías (desayuno, meriendas, cenas con invitados) también facilita encontrar lo que necesitas sin perder tiempo.

3. Utiliza bandejas giratorias en los estantes más altos

Para esos rincones altos y de difícil acceso, una bandeja giratoria puede ser la salvación. Son perfectas para almacenar tazas pequeñas, recipientes o piezas de vajilla que no usas todos los días. Con solo girarla, puedes acceder a lo que necesitas sin tener que sacar todo lo que hay delante. Son especialmente útiles si tienes muebles profundos o esquineros.